Al fin se empieza a vislumbrar claridad por las ventanas del avión y es que al fin estamos llegando a Narita, el aeropuerto internacional de Tokyo.
Una vez hemos desayunado en el avión y acabamos de aterrizar, compruebo que por suerte, sigo pudiendo mover las piernas y no he perdido la capacidad motora de mi cuerpo.
Nuestro de día de hoy es un poco día de transición, aunque espero llegar lo antes posible a Kyoto para poder aprovechar al máximo mi tiempo en Japón.
Ya bajando por las escaleras mecánicas, vemos los primeros dibujos manga en el aeropuerto dándonos la bienvenida a Japón. Sin lugar a dudas este género levanta pasiones en Japón y en otras muchas partes del mundo, y de hecho el propio Tokyo tiene un maravilloso barrio llamado Akihabara (antiguo barrio de la electrónica) que ahora mismo se ha convertido en una fusión entre electrónica y manga y anime.
Una vez llegamos a inmigración, ya empezamos a ver lo terríblemente eficientes que son los japoneses. No solo hay apenas colas, debido a la gente atendiendo la entrada al país, sino que la persona que me hace el visado, creo que es la que más rápida lo ha hecho jamás, por lo que en poco minutos, estoy listo para coger mi maleta e ir hacia las dos cosas que tengo pendientes en el aeropuerto: cambiar algo de dinero y sacar mi JR Pass.
Me dirijo primero hacia la oficina de cambio, donde un señor muy amable, tras preguntarme un montón de cosas de España y sobre qué pensaba visitar de su país, me cambia los suficientes yenes para no pasar apuros en el caso de que haya problemas de usar la tarjeta en el país.
Posteriormente me muevo hacia donde está ubicada la oficina de la Japan Railway Company, donde con mi reserva que hice desde Internet, me dan inmediatamente mi JR Pass y me gestionan mis asientos para llegar hasta Kyoto (es mucho mejor que les pidáis que los gestionen ellos directamente, para que os den asientos reservados y no tengáis que estar buscando asiento en los vagones no reservados del Shinkansen).
Nuestra ruta es ir desde Narita a Shinagawa en el tren Narita Express. Y posteriormente coger el tren Hikari 517 de Shinagawa a Kyoto.
Una vez hemos desayunado en el avión y acabamos de aterrizar, compruebo que por suerte, sigo pudiendo mover las piernas y no he perdido la capacidad motora de mi cuerpo.
Nuestro de día de hoy es un poco día de transición, aunque espero llegar lo antes posible a Kyoto para poder aprovechar al máximo mi tiempo en Japón.
Ya bajando por las escaleras mecánicas, vemos los primeros dibujos manga en el aeropuerto dándonos la bienvenida a Japón. Sin lugar a dudas este género levanta pasiones en Japón y en otras muchas partes del mundo, y de hecho el propio Tokyo tiene un maravilloso barrio llamado Akihabara (antiguo barrio de la electrónica) que ahora mismo se ha convertido en una fusión entre electrónica y manga y anime.
Una vez llegamos a inmigración, ya empezamos a ver lo terríblemente eficientes que son los japoneses. No solo hay apenas colas, debido a la gente atendiendo la entrada al país, sino que la persona que me hace el visado, creo que es la que más rápida lo ha hecho jamás, por lo que en poco minutos, estoy listo para coger mi maleta e ir hacia las dos cosas que tengo pendientes en el aeropuerto: cambiar algo de dinero y sacar mi JR Pass.
Me dirijo primero hacia la oficina de cambio, donde un señor muy amable, tras preguntarme un montón de cosas de España y sobre qué pensaba visitar de su país, me cambia los suficientes yenes para no pasar apuros en el caso de que haya problemas de usar la tarjeta en el país.
Posteriormente me muevo hacia donde está ubicada la oficina de la Japan Railway Company, donde con mi reserva que hice desde Internet, me dan inmediatamente mi JR Pass y me gestionan mis asientos para llegar hasta Kyoto (es mucho mejor que les pidáis que los gestionen ellos directamente, para que os den asientos reservados y no tengáis que estar buscando asiento en los vagones no reservados del Shinkansen).
Nuestra ruta es ir desde Narita a Shinagawa en el tren Narita Express. Y posteriormente coger el tren Hikari 517 de Shinagawa a Kyoto.